domingo, 22 de agosto de 2021

De la peña La Gallina, palante. Homenaje a la afición azulina

 

Actualmente se tiene la idea de que la afición azulina es muy reducida, y es que lo es en una ciudad cercana a los 100.000 habitantes. Puede que haya una afición al San Fernando latente pero lo cierto es que no se parece a lo que en su día hubo.

En San Fernando hasta hace unos 50 años, ser del CD San Fernando era lo normal. La mayor parte de la localidad era socio o aficionado o simpatizante del equipo y eso se notaba con la expectación alrededor del club. Ir a Madariaga era un acontecimiento social y las gradas del viejo recinto isleño se poblaban. En la foto a continuación podemos ver a un grupo de aficionados entre los que se encuentra el cantaor José Llerena Ramos Chato de La Isla rodean a una leyenda del club isleño, José María Belizón Buada Cría.



Eran tiempos en los que la Marina era una institución muy importante en La Isla y era muy común ver gorras de plato por cualquier rincón de la ciudad. Hasta los años 80 se mantuvo la entrada de militar que era una de las que se ofrecían entre las posibilidades de entrada reducida en el campo. En la siguiente foto vemos a algunos de esos marineros que se encontraban entre los aficionados.


Las fotos de la época son muy diferentes a las de hoy en día. Hombres ataviados con traje de domingo porque ir al fútbol era el acontecimiento del día, porrones, bandas de luto en los trajes, gabardinas, gorras, boinas…



Posiblemente la Peña la Gallina fue una de las primeras que tuvo el club azulino. Recientemente la peña azulina Palante de la que hablaremos al final del artículo le tributó un homenaje tratando de localizar a los miembros que aparecen en la foto como publicó en su día la web deportiva isleña Deporte de La Isla (http://www.deportedelaisla.com/sfcd_operaci%C3%B3n_gallina.htm).



 Con la llegada de los años 80 la vida moderna influye cada vez más en la gente y con ello vuelve a aparecer un grupo de aficionados que se organiza para animar al club, en esta ocasión de otra manera. Atrás quedan los trajes y las corbatas de la Peña la Gallina y aparecen los aficionados uniformados con la camiseta del equipo, probablemente los primeros de esa guisa en nuestro club. Quienes fueran asiduos a la grada de Madariaga en los años 80 recordarán a aquella Peña CD San Fernando que animaba a ritmo de bombo debajo del viejo marcador de Gayro. En las siguientes fotos los vemos posando con el equipo y entregando un trofeo que porta en su mano Adolfo el Pony. En la imagen podemos ver a un jovencísimo Manolo Aleu, luego colaborador y directivo azulino.


                               

A pesar de que el San Fernando siempre ha contado con un grueso de aficionados robusto que por encima de todo han sido siempre del club de su ciudad, los altibajos de la década de los 80, unidos al interés por los equipos grandes y el buen momento del Cádiz parecían adormecer a la afición. No obstante, a principios de los 90 de pronto aparecieron en el viejo fondo que daba a la barriada Madariaga unos chavales portando pancartas y animando la salida del equipo con tracas. El fenómeno ultra había llegado al San Fernando. La peña Frente Isleño luego se convirtió en Orgullo Isleño e inauguró otra forma de seguir al club local con tiffos y estética que imitaba a los campos de Primera. Entre sus miembros figuraba el actual presidente azulino, Manuel Gómez Noly y otros que han formado parte de la directiva o han sido colaboradores. La peña Orgullo Isleño suma ya más de 25 años como contaba en su día Jordi Agabo.

https://www.diariodecadiz.es/deportes/bodas-plata-Orgullo-Isleno_0_1321668380.html


En esos 25 años se ha erigido en la peña más duradera del club y ha convivido con otras que han surgido y han desaparecido, pero ellos siempre estuvieron ahí. Además, han acompañado al equipo en múltiples desplazamientos e inauguraron el apoyo por parte de las peñas al club con iniciativas variadas.

En aquellos 90, Orgullo Isleño ocupó espacio con otra peña muy diferente: La Gran Familia. Una peña de otro estilo formada por matrimonios y familias que animaban de una forma muy diferente y que no se perdían un solo desplazamiento.

La llegada de las llamadas nuevas tecnologías ayudó a que la afición se fuera organizando en nuevas peñas. Así, al principio del siglo XXI el número de peñas aumentó exponencialmente y se empezó a ver cómo la afición cada vez estaba más viva. Un detalle de ello es que por las calles de La Isla los aficionados azulinos empezaban a portar orgullosos la camiseta de su equipo. Empezaba a desaparecer el complejo y ya se veía que los azulinos ya no tenían vergüenza de exhibir sus colores en su propia ciudad. Puede que el desplazamiento masivo de aficionados a la localidad granadina de Motril en una de las fases de ascenso a Segunda B tuviera algo también de culpa. En aquella ocasión se pudo ver la fuerza de la afición y cómo estaba más viva que nunca.

Afición azulina en Motril

Precisamente surgida en el ciberespacio nació la Cyberpeña azulina CDSF, impulsada a través de un foro donde se daban cita muchos aficionados azulinos de diferentes sectores. En el foro surgieron muchas iniciativas y finalmente un grupo de ellos decidió crear la peña que también aportaría muchas ideas nuevas, como un boletín o los primeros vídeos para animar a los aficionados a hacerse socios. La cyberpeña ha evolucionado a la Peña Siempre CDSF desde la que siguen animando al club y teniendo iniciativas para propagar los colores azulinos.


Otras peñas de perfil juvenil se crearon en esa época también, como los Bolillas azulinas o Pasión azulina. Esta última también tuvo mucho protagonismo durante unos años hasta que las obligaciones laborales de sus miembros lo permitieron. Lo hicieron físicamente, desde la grada con su bombo, y virtualmente a través de su página donde realizaron muchas actividades de apoyo al club como las previas de los partidos en las que tuvimos el honor de participar.


La otra peña que ha pervivido desde esa época dorada del asociacionismo azulino es La peña Palante que cierra el círculo con respecto a la afición ya que uno de sus miembros perteneció a la Peña la Gallina, Tito Rubín, y ahora lo hace en Palante. Probablemente Tito, sea uno de los aficionados más veteranos del CD San Fernando. Se trata de una peña muy activa en la propuesta de actividades para propagar los colores azulinos. Han realizado spots (donde ha participado el propio Tito), productos de propaganda y otras actividades buscando colaborar con el club. Además, son muy activos en las redes sociales y probablemente sea la peña que se ha adaptado mejor a estos tiempos.

En el campo de la Bazán se recuperó el ambiente de otras épocas

Marea azulina en Utrera

Por último, cabe mencionar a la peña Templo azulino, creada en 2014 y que tiene su sede en el local donde se alojó el club en el Polígono de Fadricas hasta que se mudó a otra ubicación y la recientemente creada Peña azulina Carmen 1698. Esta peña es la última asociación de aficionados azulinos puesto que ha sido formalizada este año de 2021 y está formada por hermanos de la hermandad del Carmen que aúnan en ella sus dos pasiones. Como podemos ver, la afición isleña no es numerosa, pero posee una vitalidad tremenda y prueba de ello es que desde hace décadas existen peñas del San Fernando, se siguen creando y se seguirá haciendo. Desde aquella peña de la Gallina hasta nuestros días.

 FUENTES DE LAS FOTOGRAFÍAS: www.deportedelaisla.com, José Luis Cardoso Macías, Cyberpeña azulina Fans CDSF, Orgullo Isleño, Peña Pasión Azulina, Juan Ramírez Malo (in memoriam), Antonio Marín https://sentirseazulino.blogspot.com/

Si falta alguna referencia con respecto a las fotos rogamos se pongan en contacto con nosotros para subsanar el error.